Está claro que muchas famosas dependen de su estética para poder trabajar: actrices, modelos, cantantes, presentadoras, etc. En mayor o menor medida, todas necesitan tener una imagen acorde con la personalidad y la proyección que quieren dar que encaje dentro de los cánones de belleza porque, de cualquier otro modo, empezarán a perder ciertos trabajos. Ahora me saltarán al cuello cientos de blogueros diciendo que eso es falso, que una cantante debe cuidar su garganta para seguir teniendo éxito y no su trasero, y estamos de acuerdo éticamente pero, en la vida real, todo dista mucho de esa filosofía maravillosa.