Los que seguís este blog habréis comprobado que una de mis obsesiones son las casas pero he de aclarar que no sólo las de los famosos. Me gusta ver los estilos, la decoración y las estancias en general (aunque sepa que nunca voy a tener nada así). De hecho, hay ahora una moda de programas de televisión como “vender para comprar” o “tu casa a juicio” que en España se emiten en Divinity, a los que estoy totalmente enganchada y ¿sabéis de lo que me he dado cuenta? Que en lo que más me fijo es en la cocina.
Os explico; mi cocina viene a ser una cosa enana y alargada donde no caben cómodamente dos personas cocinando, y no hablemos ya de poner una pequeña mesa o una bancada donde poder desayunar y esas cosas porque sería algo totalmente imposible. Por eso, cuando veo esas cocinas increíbles con islas en medio de la cocina y mesas para comer y desayunar alucino pepinillos en vinagre, porque no es sólo cosas de celebrities famosas que cuentan con unas pasta gansa, no es cosa de norteamericanos y canadienses en general con un nivel de vida decente sin que necesariamente sean millonarios ni mucho menos.
Buscando cocinas de famosos por Internet para comparar me he topado con este artículo sobre la casa de Scarlett Johansson y Ryan Reynolds, que para lo que no lo sepan, son pareja, y es de esas que yo diría que son una pasada pero sin pasarse de ostentosidad. Lo interesante para mí hoy es la cocina y, como veréis, hablamos de una gran bancada de madera libre de obstáculos donde poder cocinar cómodamente y un espacio más que amplio para poder estar varias personas allí desayunando, y eso es estupendo, pero tampoco estamos viendo una cocina lujosa con grandes detalles y un mobiliario súper cool. En esta tienda de cocinas en Sevilla, ya le he echado el ojo a un par de diseños que no desmerecen en comparación con la de Johansson aunque para que yo pudiera ponérmelas antes tendría que mudarme a una casa que tuviera una cocina algo más cuadrada y menso estilo pasillo, pero ese es otro tema.
Lo que quiero decir con todo esto es que este tipo de cocina es posible sin necesidad de dejarte el sueldo de todo un año en ella, al menos en tiendas como la que os he comentado, Andukin, porque imagino que si te vas a otro tipo de tiendas de cocina donde los que prima es el estilismo pues, la cosa cambia un poco. En mi caso el problema es el espacio, y puede que en el caso de muchos de vosotros, ¿verdad? Se ve que en España se lleva eso de las cocinas pequeñas y a comer al salón, o algo así.
Pero bueno, dejando a un lado el tema estrella de la cocina, si pasamos a la siguiente estancia fotografiada de la casa de Reynolds y Johansson, comprobaréis que, a pesar de hablar de estancias muy amplias y preciosas, no son para nada ostentosas, al contrario. Probablemente, si redujéramos un poco el espacio, podríamos estar hablando del salón de cualquiera de nuestros amigos ¿no es así? Al igual que el porche, precioso, pero muy sencillo.
Obviamente para gustos los colores pero yo soy de las que piensa que algo así, sencillo y funcional, es mucho mejor que algo recargado donde prime el dinero invertido antes que la expectativa de usabilidad y comodidad.